domingo, 27 de octubre de 2013

Los primeros pasos

Hoy vuelvo a pasarme por aquí para hablaros de los primeros pasos que debemos de dar una vez que nos comprometemos.
Hay dos formas. Una que es la más usada en nuestro país y otra, que se va introduciendo poco a poco.
La primera de la que hablaremos será de la clásica.
Tú misma preparas la boda.
Pues para comenzar hay que preguntarse el dónde, pues no es lo mismo celebrar una boda en tu ciudad que a 500 kilómetros de distancia. Entre muchas cosas por los invitados, alojamientos, preparaciones de viajes, buscar lugar de ceremonias...La organización es algo más pesada, pero hablaremos de ello en otra entrada.
Bueno, una vez que sepamos la localidad, debemos de preguntarnos si queremos que sea una boda religiosa o civil, pues en ambos casos hay que mover papeles y desplazarse en varias ocasiones o bien al juzgado o a la iglesia donde queremos realizar el enlace. Debemos de tener claro que en ambas opciones hay un coste.
Así que debemos de ir a pedir información, sobre costes, papeles necesarios...Y si ya sabemos la fecha aproximada del enlace, preguntar si está disponible y reservar.
Pensad muy bien en la fecha, pues debemos de contar con el clima, si no os agrada mucho el sofocante calor, procura casarte en primavera, si te gusta más el frío, no te vas a casar en agosto...Siempre os digo que todo depende de los novios, pero el clima es algo que se os escapa de las manos así que solo podéis jugar un poco con la posibilidad.
Sigamos, otro paso es el restaurante. Hay que reservar cuando tengamos fecha, pues si lo dejas demasiado corres el riesgo de que cuando vayas a reservar alguien se te ha adelantado, por este último motivo también es recomendable que barajes varias opciones.
Bueno, ya tenemos donde casarnos y donde celebrarlo. Así que pensemos en como avisar a los invitados, busquemos invitaciones. Contar con que la invitación debe de dar pinceladas de vuestra personalidad. por norma se encargan en imprentas cercanas a casa, pero al igual que los detalles para los invitados, se pueden encontrar una gran variedad online, y salen a muy buen precio.
Los detalles para los invitados podemos optar por la vía clásica, en la que eligiéremos un regalo para las mujeres y un puro para los hombres. Aunque hay varias alternativas muy atractivas, como un estuche con regalo para ambos por ejemplo.
Otra cosa que debemos de elegir, son las alianzas, así que no olvides visitar varias joyerías.
La floristería no puede ser olvidada, recordemos que no es lo mismo casarse por lo civil que normalmente sólo será decorado el vehículo, que si nos casamos por la iglesia que deberemos también decorarla. En caso de casarnos por la iglesia, deberíamos de hablar con el cura, porque si hay una boda antes o después de la nuestra, se pueden compartir gastos usando las mismas flores y así nos ahorramos un dinerillo. El ramo de la novia, hay quien prefiere esperar a tener el vestido para elegir el ramo, o por lo contrario, si tienes claro que flor llevar, no tendríamos más de que hablar.
No olvides al fotógrafo, siempre queremos inmortalizar cada segundo de ese día.
Peluquería y esteticista, si tienes una conocida sería perfecto, pues le será más fácil, encontrar el modo de enlazar tu personalidad con lo que ese día debe de lucir más en tí.
Pasemos a lo más importante, tu vestido. Siempre solemos tener claro el estilo del vestido y como deseamos que sea, el problema está en que muchas ocasiones, no nos vemos como creíamos que nos veríamos con el vestido de nuestros sueños enfundado. Hay quien sueña con casarse con un vestido estilo medieval y a la hora de ponérselo se ve horrible y encuentra su belleza en uno con un ajustadisímo corset y una amplia y pomposa falda. Así que un consejo, pruébate un vestido de cada estilo, porque a lo mejor el estilo que más te gusta, no es el que más te resalta tu belleza, y recuerda que ese día debes de ser la más guapa, la más especial, la princesa más bella de los cuentos.

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